Un ómnibus impacta contra una casa en La Habana tras sufrir su conductor una agresión

La Habana/Viajar en el transporte público de La Habana se ha convertido en un deporte de alto riesgo. La madrugada de este lunes un ómnibus de la ruta P7 impactó contra una vivienda en la Calzada de Luyanó, esquina a Ensenada, en el municipio de Diez de Octubre. El vehículo chocó contra la fachada de la vivienda debido a que el conductor perdió el control tras ser atacado por varios individuos.

La guagua, con el número 705, cubría el trayecto entre el Parque de la Fraternidad y la zona de Alberro. Tras salir de una parada, el chofer fue agredido por otras personas y el ómnibus terminó impactando contra la vivienda. En el accidente no se reportaron víctimas fatales ni lesionados, pero sí daños materiales severos tanto en la casa como en el vehículo.

Las imágenes del siniestro hablan por sí solas. La parte delantera del ómnibus, especialmente el parabrisas, se ven destrozados en las fotos difundidas en las redes sociales. Sobre el pavimento, los fragmentos de ladrillos de la casa dan cuenta de la magnitud del impacto. Parte del vehículo entró a la sala de la familia que, al parecer, a esa hora estaba durmiendo.

Tras salir de una parada, el chofer fue agredido por otras personas y el ómnibus terminó impactando contra la vivienda

La nota oficial, difundida por la Empresa Provincial de Transporte de La Habana, no ofrece más detalles sobre el ataque sufrido por el conductor ni acerca del detonante de la agresión. El texto solo añade que “La Policía Nacional Revolucionaria (PNR) llegó rápidamente al lugar del accidente para atender la situación”.

Este es el cuarto ataque reportado contra vehículos del transporte público capitalino en menos de un mes. El 20 de marzo, la misma empresa denunció un apedreamiento en el parque de Fábrica contra el ómnibus 5229 de la ruta 23, perteneciente a la Terminal de Lawton. 

La entidad estatal condenó “enérgicamente” el suceso, sin entrar en detalles. Dos días después volvería a reportar un ataque similar, esta vez contra la guagua número 8475 de la ruta P11. En esa ocasión apeló a “la unión entre el pueblo y la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) para disminuir estos incidentes”. Sin embargo, la semana siguiente, el vehículo 725 de la ruta P7 también fue apedreado en horas de la madrugada.

Este es el cuarto ataque reportado contra vehículos del transporte público capitalino en menos de un mes

La zona por la que circula el P7 es un área de La Habana densamente poblada y económicamente muy deprimida. Se trata también de barriadas donde se han reportado más incidencia de la droga conocida como el químico.

Tras la nueva agresión de este lunes, las redes sociales han estallado. En toda Cuba, el transporte público es uno de los servicios menos eficientes, y actualmente se mueven menos de la mitad de pasajeros que hace cinco años, de 5,9 millones de viajeros al día, se ha descendido a 2,7. Los pasajeros están obligados a esperar durante larguísimas horas en las paradas, sin ninguna certeza de poder llegar a sus destinos. La actual ola de agresiones contra el parque automotriz genera más incertidumbre, angustia y temor entre los ciudadanos. 

Los atemorizados viajeros han exigido mano dura, juicios ejemplarizantes en la televisión nacional, así como cadenas perpetuas para los responsables de estos hechos vandálicos.