La "conducta agresiva" de Estados Unidos acapara las intervenciones de la IX Cumbre de la Celac

Pese a ser uno de los pocos países que se libró de los aranceles, Cuba criticó "el chantaje, el acoso y la manipulación" de Washington

La Celac cuenta con 33 miembros de la región, entre los que no se incluyen Canadá y Estados Unidos.
La Celac cuenta con 33 miembros de Latinoamérica y el Caribe. / EFE
14ymedio/EFE

10 de abril 2025 - 05:55

La Habana/Con la imposición de aranceles a nivel mundial, Estados Unidos ofreció la excusa perfecta para que la IX Cumbre de la Celac, celebrada el miércoles en Tegucigalpa (Honduras), girara en torno a su “actitud agresiva” y pasara por alto, una vez más, los problemas que la región ha relegado por años. Las medidas dieron el pie forzado a Miguel Díaz-Canel, que criticó “el chantaje, el acoso y la manipulación” del Gobierno de Donald Trump pese a ser Cuba uno de los pocos países que no se enfrenta a las sanciones económicas.

Durante su intervención en la cumbre, el mandatario propuso “encarar los desafíos actuales colocando los intereses y objetivos” comunes “por encima de las diferencias y actuando como una auténtica comunidad regional”. Los planes concretos para consolidar esa “comunidad” quedaron suplantados por su usual voluntarismo, que pone en práctica dentro y fuera de la Isla.

También trajo a colación los temas que la prensa oficial ha estado criticando durante semanas: el traslado de migrantes a la base naval de Guantánamo, “la infame campaña contra los programas de cooperación médica” y, cómo no, el bloqueo.

La cita regional en Tegucigalpa, que incluye a 33 países, se celebra en medio de una complicada coyuntura política y económica para la región, que carece de una estrategia común frente a las nuevas presiones de Washington con aranceles del 10% para la mayoría y deportaciones masivas de migrantes.

Nicolás Maduro aludió a una "agresión civilizatoria" contra los migrantes latinoamericanos en EE UU, sobre todo los de Venezuela

Los mandatarios que asistieron a la IX Cumbre rechazaron el miércoles, en conjunto, esas políticas de devoluciones, así como el encarcelamiento de los afectados en países como El Salvador.

En particular, Nicolás Maduro aludió a una "agresión civilizatoria" contra los migrantes latinoamericanos en EE UU, sobre todo –señaló–, los de Venezuela. "Todos nuestros migrantes están siendo perseguidos como delincuentes", declaró. En ese sentido, criticó el rescate, por parte del Gobierno de Trump, de "una ley contraria al derecho público y a los derechos humanos a nivel internacional", en alusión a la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, que el chavista calificó de "anacrónica".

Con esa norma, prosiguió Maduro, se "criminaliza de manera directa a cualquier migrante para capturarlo y luego expulsarlo y meterlo en las peores condiciones en un campo de concentración que funciona como cárcel en El Salvador".

Según el mandatario, que realizó su intervención por videoconferencia, su asistencia a la Cumbre se vio cancelada por "amenazas" contra su seguridad.

Otro de los más críticos con Washington fue el colombiano Gustavo Petro, que comparó a los migrantes expulsados de Estados Unidos con los esclavos africanos que llegaron encadenados al continente en la época de la colonización. "La migración es apenas la consecuencia de esa desigualdad geográfica y del efecto de la crisis climática" en los países pobres, dijo Petro. Algo que, aclaró, no se soluciona "poniendo cadenas, llevando la población migrante a El Salvador, a unas cárceles para criminales".

La anfitriona de la cita regional, la presidenta hondureña Xiomara Castro, añadió que los jóvenes latinoamericanos se han convertido en esos migrantes que, buscando el “sueño americano”, hoy son deportados de forma masiva por Estados Unidos, por lo que pidió "respetar" a la Celac como zona de paz.

Y el boliviano Luis Arce resaltó en su discurso "la criminalización de la migración, así como la aplicación de políticas que fomentan deportaciones masivas y tratos inhumanos hacia las personas migrantes", pues tales prácticas "vulneran derechos fundamentales" y "desconocen las causas estructurales que obligan a miles de personas a desplazarse", dijo.

Muchos de esos países latinoamericanos han recibido en los últimos meses vuelos con migrantes deportados desde Estados Unidos, que ha intensificado las redadas en escuelas, colegios e iglesias, lugares en los que antes estaba prohibido hacerlas.

Algunos de los mandatarios presentes rechazaron, en un tono más rebajado, las políticas de Washington, llamando a la conciliación

Algunos de los mandatarios presentes rechazaron, en un tono más rebajado, las políticas de Washington, llamando a la conciliación. Es el caso de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quien pidió a los líderes regionales de la Celac cooperar para atender la migración "desde una perspectiva humanista", con atención a las causas, como la desigualdad, el desempleo y la violencia.

Por su parte, el guatemalteco Bernardo Arévalo reconoció que las razones principales de la migración están en los países de origen de los migrantes: "Necesitamos políticas que reconozcan que la primera razón de la migración se encuentra en la falta de atención a las necesidades fundamentales a la población de nuestros países y creemos que en el marco de una realidad donde existe esta movilidad toda posición y forma de enfrentar los retos se lleve a cabo en atención a la dignidad de las personas".

El grupo firmó la Declaración de Tegucigalpa, que fue "adoptada por consenso suficiente por 30 Estados miembros". Según informó a la prensa el canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina, los tres países que se “distanciaron” fueron Argentina, Paraguay y Nicaragua. "Son países que por sus propias razones deciden no adoptar la resolución" y que luego revelarán sus razones, detalló el alto funcionario hondureño.

La Declaración resalta "la plena vigencia de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, sustentada en la promoción y el respeto a los propósitos y principios de la Carta de la Organización de las Naciones Unidas y del Derecho Internacional".

Se añade "la cooperación internacional, la democracia y el Estado de Derecho, el multilateralismo, la protección y promoción de todos los derechos humanos, el respeto a la autodeterminación, la no injerencia en los asuntos internos, la soberanía y la integridad territorial", a pesar de tener entre sus filas a tres de las grandes dictaduras del hemisferio, Cuba, Nicaragua y Venezuela.

La Declaración le da también la "bienvenida" a Colombia cuya presidencia pro témpore de la Celac asumió el presidente de ese país, Gustavo Petro, quien en la cumbre expresó que el mundo vive "una tensión entre multilateralismo y soledad", por lo que abogó por una agenda de colaboración entre países. La ciudad colombiana de Santa Marta acogerá este noviembre la cuarta cumbre de la organización con la UE, según se anunció este miércoles.

También te puede interesar

Lo último

stats